Sor Vicenta Rondizzoni, nació
en Santiago, hija del general José Rondizzoni. Desde muy pequeña se destacó por
su preocupación por los más necesitados.
Sor Vicenta se destacó por su abnegación y
amor por los niños y los enfermos. Fue
superiora de un sanatorio de tuberculosos en Los Andes, y del Hospital San
Borja, trabajó por los heridos en la
Guerra del Pacifico y junto al doctor Jacinto Ugarte fue creadora del primer
dispensario de niños en Chile.
La historia de Sor Vicenta es un ejemplo de
caridad, no se conoce muchos detalles de su vida, pero sin duda no debe ser
olvidada por nuestra historia.
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