José Freinademetz fue el primer misionero enviado por Arnoldo Janssen a China, cuatro años después de la fundación de la Congregación del Verbo Divino en Steyl en 1875. Nació el 15 de abril de 1852 en Oies, Tirol del Sur, y fue el cuarto de una familia de trece hermanos. Hizo sus estudios, en el idioma ladino, en la cercana localidad de Val Badía y posteriormente, en alemán, en la ciudad de Brixen, Austria. Ya entonces se mostró interesado por los misioneros que anunciaban el Evangelio en lejanos países. Terminados sus estudios, ingresó al seminario diocesano de Brixen, ordenándose sacerdote en 1875.
Su primer lugar de trabajo se ubicaba cerca de su pueblo natal, pero ya tenía la inquietud de buscar otros horizontes. En 1878, se informó de la existencia de una casa misional en Steyl, Holanda. Tomó contacto con el fundador Arnoldo Janssen, a quien manifestó su intención de ser misionero. Acogido en la casa de Steyl, muy pronto empezó a prepararse para el primer envío misional a China, junto con Juan Bautista Anzer. En 1879, ambos se dirigieron a Hong-Kong, donde estudiaron el idioma local y tomaron contacto con la nueva cultura. José hizo sus primeras experiencias misioneras en Saikung, un pequeño pueblo de pescadores. Allí asumió el nombre chino de Fu-Shenfu. Posteriormente, se hizo cargo, junto con J.B. Anzer, de la primera misión verbita en la provincia de Shandong, con una población de treinta millones de habitantes, de los cuales siete mil eran cristianos. Allí tuvo que aprender un nuevo dialecto chino y trabajó durante los veintiséis años siguientes. Los comienzos estuvieron marcados por la pobreza, la persecución y el rechazo de quienes se convertían al cristianismo o mostraban interés por él. A pesar de las dificultades, él permaneció fielmente junto a las comunidades cristianas y nunca regresó a Europa. José Freinademetz falleció el 28 de enero de 1908, en una epidemia de tifus que afectó a la misión. Antes de morir, dejó establecido su espíritu misionero: “Nosotros hemos venido aquí a servir”. Este fue el lema que inspiró toda su vida. Hasta el día de hoy, los misioneros verbitas están tratando de hacerlo realidad en las más diversas realidades culturales y religiosas del mundo; también en China. Fue canonizado en 2003 junto a su fundador.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario